Análisis de la evolución atmosférica, miércoles 30 de septiembre de 2020

Mucho dinamismo e incertidumbre en una atmósfera en modo invierno.

En general estoy contento con la evolución de la atmósfera en este inicio del otoño. Aunque han tardado un poco más de lo que esperaba, se están cumpliendo las entradas marítimo polares con las nevadas tempranas que están siendo muy copiosas en los sistemas montañosos del Norte de la Península. También se están generando sistemas de bajas presiones muy profundos. Con una potente ciclogénesis explosiva al Norte de la península en ciernes. 

Los índices de NAO y AO con tendencias negativas, con un vórtice polar troposférico muy fragmentado.

Las piezas se mueven en la dirección correcta, pero siempre hay muchos matices. Es realmente apasionante seguir día a día la evolución para ver si las previsiones se van cumpliendo o no. 

¿Qué debe suceder ahora para seguir el patrón esperado?

Las entradas marítimo polares que dan el pistoletazo de salida a la dinámica ciclónica importante, deben dar paso a una circulación más zonal (Oeste a Este). Esta transición debe ser responsable de comenzar a dejar precipitaciones más importantes en zonas cada vez más al Sur de la Península.  Los modelos de momento no lo muestran en sus salidas de una forma clara, pero espero que lo hagan en las próximas fechas. 

Quiero mostraros la enorme dificultad que tienen los modelos meteorológicos para simular la evolución de la atmósfera a futuro. 

Os voy a enseñar la salida de ensembles del modelo GFS. Lo que vais a ver son distintos escenarios para la evolución de la ciclogénesis explosiva de las próximas horas. 

Como no conocemos el estado inicial exacto de toda la atmósfera, sobre todo de zonas de alta mar, donde no tenemos estaciones meteorológicas, el modelo asume que tenemos errores de partida. Para intentar solucionarlo, se insertan pequeñas modificaciones que dan como resultado una evolución distinta en el tiempo, cuantas más horas pasan, más se desvían los escenarios que parten con ligeras modificaciones.

Al final, con todos los datos, aproximaciones y cálculos, el modelo nos lanza por un lado los posibles escenarios individuales y por otro una salida de control y otra con la media. De esta forma intentamos reducir lo máximo posible la incertidumbre, algo que nunca lograremos eliminar por completo. 

Este diagrama de ensembles está sacado para la ciudad de París. Vemos los distintos escenarios en colores, como según avanzamos en el tiempo, la dispersión aumenta. Líneas superiores presión en superficie e inferior precipitaciones. 

Pero ahora nos vamos a ir a la zona cero de la ciclogénesis explosiva. Nos vamos a un punto de la Bretaña francesa, donde el ciclón llegará a su cénit.

La caída de presión es brutal, pero si te fijas, aún sabiendo el modelo que se va a producir un evento de gran magintud, no sabe cómo se va a mover el ciclón y cuánto va a caer la presión en este punto. Si ves las rayas de colores, te darás cuenta de la incertidumbre que hay, como se cruzan bajando o subiendo antes o después o llegando más abajo. Un verdadero lío que muestra la elevada dificultad de modelizar el evento a pocas horas de producirse.  

Pero espera, creo que lo vas a ver con mayor claridad en las siguientes imágenes. Voy a mostrarte por separado algunos de esos escenarios de colores, pero en un mapa. 

Todas las simulaciones son para el sábado a las 2 de la mañana, es decir, poco más de 48 horas:

Ahora entiendes la dispersión en las gráficas. Según el escenario posible, el ciclón está cientos de kilómetros más al Norte, con menos o más fuerza, con consecuencias muy distintas para las regiones afectadas. 

Ponte en la piel ahora de un predictor meteorológico u organismo que tiene que emitir un aviso por vientos para una zona concreta. Los escenarios que observamos tienen consecuencias muy distintas para el Cantábrico, sobre todo en su mitad más oriental. 

Así de apasionante y viva es la Meteo. Es la Madre Naturaleza en estado puro, desplegando toda su energía. El hombre intenta tener bajo control lo que sucede o va a suceder, pero lo cierto es que la última palabra la tendrá siempre la Madre Naturaleza. 

Un servidor espera que en las próximas fechas los modelos comiencen a mostrar la mencionada circulación zonal, con precipitaciones comenzando a afectar a zonas más al Sur en las próximas semanas. 

¡Seguiremos atentos suceda lo que suceda!