La borrasca nacerá fruto de un proceso de ciclogénesis explosiva en aguas del Atlántico y barrerá el noroeste de Europa con vientos huracanados.

Ciclo de ciclón o borrasca y génesis de formación. Un término, el de ciclogénesis, que se ha utilizado mal en los últimos 10 años en nuestro país y que aunque menos, se sigue utilizando de forma incorrecta. Hay muchas personas que aún piensan que el término implica que estamos ante un evento peligroso, cuando en realidad hablamos del nacimiento de una borrasca. La ciclogénesis es el “embarazo” de una borrasca. Todas las borrascas nacen fruto de una ciclogénesis. Formación de un ciclón. 

Explosiva o bomba meteorológica

Ahora bien, cuando una borrasca se gesta de una forma violenta, desplegando en pocas horas vientos de más de 100kmh, en algunos casos sostenidos con rachas de 200kmh, estamos hablando ya de otra cosa muy distinta.

Lo que va a suceder en la segunda mitad de esta semana muy cerca del oeste de Europa, aunque sin afectar de forma importante a nuestro país, es un proceso en el que encaja perfectamente el calificativo de explosivo, por la virulencia y rapidez con la que se despliega la energía. Lo de bomba meteorológica reconozco que no me gusta tanto, pero es una apreciación subjetiva mía.

Tenemos que diferenciar esta ciclogénesis de las demás, porque tenemos que transmitir a las personas que se pueden ver afectadas que es un evento atmosférico potencialmente peligroso.

¿Qué va a suceder en los próximos días?

Pues te voy a preparar un vídeo con la secuencia animada de la presión atmosférica en superficie. Este tipo de ciclones provocan que los valores de presión en su núcleo se desplomen rápidamente, haciendo que la diferencia con las áreas circundantes se amplifique. Las isobaras, esas líneas que unen puntos con la misma presión atmosférica se juntan, delatando la rápida caída de sus valores.

Como a la atmósfera no le gustan los desequilibrios, pone en marcha sus mecanismos de compensación en forma de vientos, que se desplazan hacia el núcleo del ciclón para rellenar esa bajada de presión. Cuanto más baja es la presión en su núcleo y, por ende, mayor diferencia (gradiente), más rápido se tienen que desplazar los vientos para equilibrar. Por eso cuando ves un mapa con las isobaras muy juntas, implica que en esa zona los vientos son más intensos.

Vídeo con la simulación de presión en superficie, modelo GFS

Vas a observar como después de su paso seremos alcanzados por parte del aire frio que arrastra, pero nada que ver con el evento al que se van a enfrentar nuestro vecinos.

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Rachas de viento, viernes 18, modelo GFS

Los vientos pueden superar los 150Kmh fácilmente regiones del sur de las Británicas, aunque de momento aún no conocemos la trayectoria exacta del ciclón con sus vientos más virulentos.

Rachas de viento, viernes 18, modelo ECMWF

El modelo ECMWF dibuja rachas de 170Kmh en estos momentos.

Imagen: windy.com

Olas de más de 12m

En estos momentos los modelos numéricos dibujan olas de más de 10m llegando a las costas de Europa el próximo viernes.  Al norte de la Península llegarán con menos energía, con alturas en torno a los 5m. 

Piensa que esos vientos huracanados van a presionar la superficie marítima durante horas, acumulando gran cantidad de energía que levantará verdaderos muros contra las costas. El mar de fondo generado cientos de kilómetros mar a dentro, llegará acompañado de fuertes vientos que darán un plus de energía al oleaje.

¿Cómo afectará esta borrasca explosiva a España?

Pues como adelantamos en análisis de días pasados, pasará lejos de nuestras costas, pero conseguirá cambiar la dinámica en nuestra vertical, con un aumento de la nubosidad y las precipitaciones en algunas regiones que veremos con más detalle a lo largo del día de hoy. También provocará un descenso acusado de los termómetros, que pasarán a valores incluso más bajos de lo habitual el fin de semana. La nieve volverá a caer en nuestras montañas el próximo fin de semana.

Una pulsación que afectará menos a nuestro país, pero que recordará a otras regiones de Europa que don invierno está muy vivo, aunque aún no haya decidido presentarse como dios manda en nuestras latitudes. Cuando lo haga es probable que quiera recuperar el tiempo perdido invadiendo el turno de la primaver, o al menos esa es la dinámica de los últimos años, con primaveras muy lluviosas.

Veremos qué intenciones tiene este año.

Saludos.