Seguimiento nº 6, pulsación ciclónica en el Atlántico 22 de febrero

Con los modelos en la mano y teniendo en cuenta que vamos a entrar en plazos más fiables, la evolución no es buena

Cuando los modelos insisten tanto en un bloqueo anticiclónico como el que va a volver a resurgir en los próximos días, las expectativas se ven mermadas al mínimo. Si ya teníamos pocas probabilidades la semana pasada, en estos momentos desaparecen casi por completo. 

El “monstruo” que va a emerger justo por nuestra vertical en los próximos días, va a conseguir no solo alejar el escenario que esperaba, sino ofrecer exactamente todo lo contrario. 

Hemos hablado muchas veces de los efectos del Cambio Climático Abrupto en los que ya no caben medias tintas. Las ondulaciones del Jet provocan por un lado eventos históricos de frío y nevadas como los de Europa, América, e incluso en Rusia, donde Moscú ha batido un récord histórico de nieve que llevaba 140 años vigente. Incluso hemos visto nevadas históricas en Hawái. 

Pero en nuestro país hemos comenzado el otoño bajo los efectos del ramal descendente del Jet, con un evento de frío y nieve que me hacía pensar que todo evolucionaba por el camino esperado, pero posteriormente hemos quedado en la parte “mala” de las ondulaciones, algo que seguimos arrastrando y seguiremos al menos durante los próximos 7-10 días. 

Voy a hacer un pequeño montaje con el Photoshop para que puedas ver lo que hace nuestro amigo el Jet Stream y como decide dónde se colocan las bajas presiones y dónde las altas. Muchas veces (yo el primero), utilizamos frases como “batalla entre las bajas presiones y el anticiclón”, lo que hace que la comunicación tenga más pasión, pero en realidad no se produce una guerra o lucha entre ambos. Os voy a contar un secreto: el anticiclón y las borrascas son hermanos… shhh pero no se lo digas a nadie. 

El padre de ambos es el Jet Stream y es el que decide dónde se tienen que colocar cada uno de ellos. 

He superpuesto el mapa del Jet Stream sobre el de presión y altitud geopotencial, para que veas como se curva justo delante de la Península, inyectando para el próximo día 22 masas desde latitudes más bajas, que arrastran aire más cálido por ser zonas donde tenemos mayor radiación solar. Quiero que te fijes como la ondulación en forma de V tiene en su seno a las bajas presiones y la ondulación opuesta, da lugar al centro de altas presiones sobre España, Francia, Alemania y otros países de Europa.

Si te paras a pensar, tenemos por un lado las bajas del Atlántico, que no van a llegar a afectarnos, quedándose una vez más a las puertas de la entrada sin “invitación”, y por el otro lado, tenemos el ramal descendente del Jet, que en artículos pasados algún modelo insinuaba con una inyección retrógrada (Este a Oeste) pero que va a afectar a zonas próximas al Sureste de Europa, quedándonos nosotros en el “limbo meteorológico”. 

La pulsación que se queda al Sureste de Europa no tiene desperdicio, pero los modelos insisten en no darle el “destino ibérico” al tren que tantas alegrías blancas nos trajo el año pasado. 

A cambio, este año tenemos otro tren que llega desde zonas más áridas y cálidas, dejando amplias zonas de Europa con temperaturas muy superiores a las normales. Como he dicho al inicio del artículo, podríamos decir que el pronóstico para España lo he hecho al revés, y el día 22 vamos a estar bajo unas condiciones que se sitúan en el lado opuesto de lo que un servidor esperaba. 

Los índices de NAO van a bajar de una forma más marcada tal y como comentamos al inicio del seguimiento, pero se va a producir un “rebote” enseguida, que volverá a dibujar un escenario poco favorable para ver cambios.

¿Qué podemos esperar a largo plazo? 

Con los modelos en la mano la verdad es que no se aprecian hilos de esperanza en el horizonte. Si vemos las medias de ensembles, o cualquier herramienta que nos pueda dibujar las probabilidades de cambio en el horizonte, las noticias no son buenas. Si la semana pasada veía un hilo fino del que tirar, en estos momentos no lo veo. 

Aquí vemos el escenario planteado por los ensembles del modelo europeo ECMWF para finales de mes y es muy contundente con el bloqueo. 

¿Quiere decir esto que tenemos que dar por perdido el mes de febrero para ver lluvias o nieve?

Por contundente que sea el escenario dibujado en estos momentos por los modelos, estamos hablando de plazos largos y no podemos decir categóricamente que hasta marzo no vamos a ver la lluvia o la nieve sobre España. Los últimos días de febrero aún son “tierra por descubrir” y aunque el bloqueo puede quedarse con nosotros más tiempo incluso, no podemos ser pesimistas. No pinta bien la cosa, pero la esperanza es lo último que se debe perder siempre. 

Pero eso no quita que veamos la realidad del momento. Ahora tenemos que observar como se desarrolla el potente anticiclón y ver su capacidad de aguante o regeneración. 

Mi percepción de lo que está sucediendo

Mi percepción de lo que está sucediendo es que estamos ante un avance más rápido del Cambio Climático Abrupto que está provocando unas ondulaciones más marcadas de la corriente en chorro(Jet). Una percepción de desajustes mucho más amplios de los patrones atmosféricos, pues un servidor esperaba las nevadas y el frío histórico de Europa y USA, pero no las olas de calor que han asolado Australia, o las nevadas de Hawái entre otras como las nevadas récord de Moscú.

Seguro que se me escapan cosas, ya que no me afano en buscar noticias sobre eventos que demuestren el Cambio Climático Abrupto o justifiquen el pronóstico para el Hemisferio Norte. De hecho, no veréis prácticamente noticias o artículos en Meteovigo que hayan dado bombo a lo que ha sucedido en el Hemisferio Norte este invierno. 

Por desgracia no va a hacer falta, ya que la evolución del Cambio es tan evidente a día de hoy, que no tardaremos en volver a ver sus efectos sobre nuestro país. Como ya sabéis, dependiendo de los ramales del Jet que nos afecten, podemos tener episodios de sequías como las que provocaron los incendios de Galicia y Portugal, o pulsaciones de aire frío y nevadas como las del invierno pasado. Extremos mucho más amplificados y persistentes en el tiempo. 

Para los que no lo hayan visto, vuelvo a colgar un vídeo de hace un año donde hablo de estos patrones del CCA:

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