Pronóstico estacional para el otoño de 2021 en España, en un momento en el que la atmósfera está demostrando a escala global que los cambios abruptos en la circulación han llegado para quedarse y amplificarse.

Hace años, las noticias de eventos meteorológicos extremos llegaban desde zonas lejanas a nuestro país con una recurrencia moderada, con inundaciones o eventos atmosféricos particularmente intensos o anómalos que afectaban a una parte de algún país. En los últimos años, estamos observando cómo los eventos atmosféricos tienen unos patrones más erráticos y sobre todo, son capaces de abarcar regiones más amplias con sus anomalías, que además de mantenerse durante periodos más largos de tiempo.

Las noticias de récords de temperaturas máximas o mínimas se producen casi de forma constante, tanto en invierno como en verano, con el Jet Stream “desbocado”, trazando unas ondulaciones que amplifican las anomalías de signos contrarios. 

Si ya es complicado hacer un pronóstico meteorológico a tres meses vista, lo es más aún en un contexto como el actual, en el que la Madre Naturaleza está dando un paso adelante en los cambios abruptos en busca del equilibrio.

Todo lo que existe en el Universo está en constante evolución en busca de un equilibrio con diferentes procesos que por caóticos o aleatorios que puedan parecer, siempre tienen un propósito.

¿Cómo se está comportando la atmósfera?

Pues lo más llamativo de todo para un servidor, es algo que llevamos años analizando y advirtiendo, con un Jet Stream cada vez más ondulado y propenso a los bloqueos en sus ramales que provocan anomalías cálidas o frías en amplias regiones durante periodos que en ocasiones se extienden por semanas.

A inicios de 2018 publicamos un vídeo explicando lo que estaba sucediendo con el Jet Stream y sus ondulaciones y lo que podría suceder en el futuro

Jet Stream

Un Jet Stream que circula más recto de oeste a este es más fácil de predecir, pero cuando se retuerce y amplifica sus ondulaciones, provoca patrones más erráticos, además de alcanzar con sus ramales latitudes muy alejadas con masas opuestas que intercambia con más facilidad. 

Con las flechas de colores te muestro los ramales ascendentes y descendentes que dibuja el pronóstico del modelo GFS para inicios de septiembre. Es sólo a modo de ejemplo, no es un pronóstico fiable, pero me sirve para mostrarte algo que sí o sí vamos a seguir observando en los próximos meses y años.

La línea blanca discontinua, representa una trayectoria del Jet más zonal imaginaria, es decir, de oeste a este, dejando las masas de naturaleza opuesta más o menos en las latitudes que les corresponden en función a la cantidad de radiación solar que reciben. Si nos vamos más hacia el Ecuador, recibimos más, y si vamos a los polos, menos, sobre todo ahora que vamos caminando pasito a pasito hacia los meses invernales.

¿Qué va a suceder este otoño?

La respuesta no es sencilla, pero hay algunos datos que debemos tener en cuenta para saber qué puede suceder, sobre todo si continuamos con un patrón similar, mientras el aire frío se va acumulando en el Ártico.

Extensión de hielo marino en el Ártico

La extensión del hielo marino del Ártico es la más alta desde 2014, y podría alcanzar dicho registro en las próximas semanas.

La línea azul representa la extensión durante este año 2021, y la roja discontinua, el mínimo histórico registrado en 2012. Como se puede comprobar, este año el hielo marino del Ártico va aumentando a buen ritmo, al tiempo que la radiación solar disminuye y nos acercamos al invierno. Estos patrones no sólo obedecen a la radiación solar, sonó que son el resultado de los movimientos de la circulación atmosférica que ha permitido que el hielo aguantase más que otros años durante el verano en ciertas zonas del Ártico.

Recuerda que el hielo marino del Ártico se derrite y recupera en cada estación del año, con años en los que se recupera más, y otros en los que le cuesta.

Si te enseño en la gráfica el año actual (azul) y el mínimo histórico (rojo), junto con las franjas grises que representan las medias, te harás una idea mejor de la situación de este otoño.

Índices de AO y NAO

Los índices de AO y NAO están en valores negativos en estos momentos, y se espera que se recuperen a valores neutros en este arranque del otoño meteorológico.

Esto es compatible con un tiempo variable, sin dominios claros de altas presiones, en la línea de los últimos meses, sobre todo en la mitad norte. Cuando los índices se disparan a valores positivos aumentan las probabilidades de tener un tiempo más seco y si se desploman aumentan las de ver un tiempo más frío en inestable.

ENSO y anomalías oceánicas

En un momento en que que se vigila la probabilidad de que el fenómeno de LA NIÑA nos acompañe durante el otoño, un servidor recuerda que sus efectos de forma indirecta sobre nuestro país no son tan claros, sobre todo, por la cantidad de factores que interactúan con su señal antes de llegar a nosotros. No soy partidario de atribuir de forma directa o indirecta sus efectos sobre una estación más seca o húmeda en nuestro país, sino más bien lo considero uno de los elementos a tener en cuenta en combinación con otros. No es tan fácil cómo decir: si hay NIÑA, el otoño será más seco o lluvioso. La atmósfera no es tan simple.

Te dejo enlace a los boletines sobre la evolución del ENSO

Temperatura del Mediterráneo

Pero sí hay una señal clara que influye en la evolución del otoño en nuestro país, y es la temperatura del Mediterráneo, ya que su energía acumulada es un factor potenciador de la evaporación, y por ende, de las lluvias sobre nuestro país.

La temperatura del Mediterráneo está por encima de los valores medios, con anomalías cálidas que en algunos puntos son bastante marcadas. Pero incluso este factor por si solo, no tiene consecuencias si no se dan otros al mismo tiempo, como la llegada de DANAs o vaguadas que provoquen el contraste necesario para el desarrollo de lluvias torrenciales.

¿Qué sucederá este otoño?

Pues un servidor reconoce que los últimos meses han sido un tanto complejos a la hora de seguir el guión de la Madre Naturaleza con la atmósfera, en un verano en el que el norte se ha visto bajo un constante flujo de vientos más frescos e incluso por momentos frío, algo que sin ser tan marcado, también ha afectado a otros puntos del país, que salvando los episodios de calor puntuales, han visto un verano con temperaturas más contenidas, no en todos los puntos, pero sí lo hemos visto, incluso en el sur.

El comienzo de la temporada está marcado por las tormentas que van a ser muy intensas en algunos puntos, pero creo que el arranque del otoño meteorológico tendrá una influencia anticiclónica mayor, al menos en la mayor parte del país de lo que pueda parecer en este momento. Estas dos primeras semanas veremos la llegada de algunas pulsaciones de inestabilidad, pero el ascenso de los índices de AO y NAO nos anuncian que los bloqueos en latitudes altas van a perder fuerza.

Modelo GFS

Te voy a mostrar una secuencia del modelo GFS para los próximos días donde verás cómo desaparece el potente bloqueo que hemos seguido desde el pasado día 17.

Creo que este arranque del otoño meteorológico será variable, con algunos momentos en los que el anticiclón ganará terreno, sobre todo a mediados de mes, pero poco a poco veremos una tendencia en la atmósfera que creo marcará este otoño 2021. 

Si todo evoluciona como un servidor espera, la circulación sobre nuestro país será muy meridional este otoño, con entradas de masas desde latitudes altas que dejarán temperaturas por debajo de los valores medios con frecuencia, sobre todo en el norte y a partir de octubre.

Lluvias

Las lluvias más importantes las espero en el norte de la Península y Mediterráneo, aunque también tendremos episodios en el sur. Los episodios de lluvias pueden alcanzar cierta virulencia en el Cantábrico Oriental y el litoral catalán.

Espero un otoño con lluvias muy por encima de la media en el extremo norte de la Península y ligeramente por encima en el Mediterráneo, en la zona centro y sureste, dentro de la media y en el suroeste, por debajo, algo que espero comience a cambiar a finales del otoño.

En Baleares, Ceuta y Melilla, dentro de la media, o ligeramente por encima en las islas, donde las tormentas podrán ser muy intensas en algunas fases del otoño.

En Canarias, espero un otoño más húmedo de lo habitual, sobre todo en las islas occidentales.

Nevadas

Las nevadas durante este otoño de 2021 seguirán las misma línea de años anteriores, con su llegada temprana a nuestras montañas y otros puntos del Europa. Veremos nuestros sistemas montañosos, sobre todo de la mitad norte, vestirse de blanco con una frecuencia mayor a la de los otoños de la década pasada, cuando la nieve ni llegaba ni se la esperaba. De hecho, el otoño llegó a llamarse “veroño” no solo por la falta de nieve, incluso en su fase final, sino por las altas temperaturas que alargaban el verano hasta más de la mitad del otoño.

Espero que este año tampoco suceda, y que la nieve ocupe su lugar e incluso lo haga antes de tiempo y en cantidades más generosas.

Temperaturas

Las temperaturas sufrirán como viene siendo habitual cambios abruptos que nos llevarán a valores por encima o por debajo de la media, pero serán más llamativos los eventos de frío anticipados, que llegarán este otoño si se cumplen los pronósticos.

Las temperaturas, en general, estarán dentro de la media, o ligeramente por encima en el suroeste de la Península, dentro de la media en el centro y sureste, y por debajo en el resto de la Península, sobre todo en el norte-noreste. En Ceuta y Melilla, dentro de la media y en Baleares, ligeramente por debajo. En Canarias, dentro de los valores estacionales.

Vientos

Los vientos serán mucho más marcados en el norte de la Península, sobre todo en el noreste y, en ocasiones, en el Mediterráneo, ante la gestación de centros de bajas presiones, sobre todo en la zona norte. Un Jet Stream muy ondulado, será el impulsor de la llegada de vaguadas y posibles interacciones en el Mediterráneo que alimenten estos eventos.

Europa recibirá pronto las primeras borrascas con intensos vientos que serán muy importantes en algunas fases del otoño. España puede quedar bajo los efectos de alguno de estos sistemas y provocar vientos importantes en el norte, aunque espero que no sean muy frecuentes.

Ciclones tropicales y post-tropicales

Algo de lo que ya hemos hablado hace unos días en una publicación sobre el acercamiento de huracanes a España, pero que quiero recordarlo en este pronóstico estacional. La incontestable recurrencia con la que se están acercando a nuestro país los ciclones tropicales en los últimos años, obliga a que el pronóstico estacional incluya una previsión sobre la posible llegada a aguas cercanas de uno de estos sistemas. La temporada de huracanes en el Atlántico parece haber despertado y la previsión de que pueda se más activa, nos hace poner la lupa en el océano y en los modelos.

Anomalías superficie oceánica y marítima

En estos momentos de la temporada tenemos anomalías positivas, es decir, por encima de lo habitual en la mayor parte del Atlántico Norte, algo que siempre es un plus de energía, sobre todo en aguas tropicales.

Llama la atención las anomalías frías del suroeste de las islas Canarias, que contrastan con las cálidas del noroeste. Estas anomalías son eso, desviaciones de los valores medios, que no confundir con la temperatura de la superficie oceánica.

Temperatura superficie marítima

Las anomalías del norte de las Canarias y entorno de Madeira se pueden justificar en este mapa, donde sí vemos las temperaturas de la superficie marítima. Se observa una extensión de aguas más cálidas hacia Madeira.

De todas formas, estamos analizando aguas que superan por poco los 24º, insuficientes para alimentar un huracán, o al menos hacerlo durante un tiempo considerable. Recuerda que un huracán necesita aguas por encima de los 26º para mantener su energía, aunque cuando abandonan las aguas más cálidas, pueden mantener parte de sus características durante algunas horas, sobre todo, si no tienen vientos cortantes en altura y las aguas siguen siendo relativamente cálidas.

Pero cómo ya dije en el artículo, las probabilidades de que suceda algo así son extremadamente bajas y de alcanzarnos, lo haría con poca fuerza, siendo una borrasca explosiva invernal incluso más peligrosa.

En resumen

Un otoño por delante en el que espero que las pulsaciones de aire frío consigan alcanzar nuestro país con relativa facilidad, dejando precipitaciones sobre todo en el norte, con nevadas tempranas en las montañas y temperaturas en valores medios o inferiores en general. El Mediterráneo puede tener un otoño particularmente activo, con eventos de fuertes lluvias y vientos, que pueden afectar también con fuerza el Cantábrico Oriental.

La zona con menos probabilidad de lluvias será el suroeste, aunque espero que la tendencia cambie para esta zona al final del otoño. Canarias puede tener un otoño más húmedo de lo habitual, debido a la circulación meridional que permita la llegada de las masas más frías a estas latitudes.

Estaremos pendientes de la evolución de la atmósfera en las próximas semanas para ver si el pronóstico va por buen camino.

Comenzamos una nueva temporada en Meteovigo con una cosa bien clara como siempre: la última palabra la tendrá La Madre Naturaleza.

Un fuerte abrazo.