El modelo ECMWF también profundiza de forma explosiva la borrasca del martes

En uno de los artículos de ayer comentamos la posibilidad de que una de las borrascas que se va a gestar camino de la Península en este temporal invernal, pueda profundizarse de una forma rápida o explosiva. El conocido proceso de ciclogénesis explosiva. Formación de una borrasca de toda la vida, de una forma muy violenta en menos de 24 horas.

¿Qué es una ciclogénesis explosiva?

Hay algunas personas que utilizan la palabra ciclogénesis como si implicara un evento atmosférico peligroso. Pero en realidad, la palabra ciclogénesis, define simplemente la formación de un ciclón o borrasca. Ciclo de ciclón y génesis de formación. Lo que implica un peligro potencial es la palabra explosiva, término que se la aplica por el hecho de que este proceso de fortalecimiento sucede en un corto espacio de tiempo, de una forma brusca. Una borrasca poco profunda, se fortalece en pocas horas, pasando a ser un poderoso ciclón con vientos huracanados que levantan un intenso oleaje. 

En nuestras latitudes se suele considerar ciclogénesis explosiva a toda borrasca que logre profundizarse unos 20 milibares en menos de 24horas. 

¿Vamos a tener una ciclogénesis explosiva el próximo martes cerca de nuestro país?

Pues según los cálculos actuales de modelos como ECMWF, el próximo martes nos alcanzará una borrasca en proceso de ciclogénesis explosiva, con intensos vientos y olas de más de 8 m en la costa. Otros grandes modelos numéricos meteorológicos como el GFS o el GEM también lo respaldan en estos momentos.

Modelo ECMWF, lunes 1:00h a martes 1:00h

Vas a ver como la borrasca pasa de tener en su núcleo una presión mínima central el lunes a la 1:00h de 1005 milibares, a situarse el martes a la misma hora en el Cantábrico con 985 milibares, aunque previsiblemente podría llegar hasta los 975 poco después. Su presión mínima central cae 20 milibares en 24 horas. Si se cumple este escenario, técnicamente estamos hablando de una ciclogénesis explosiva.

Modelo GFS

Según el modelo GFS, la borrasca pasará de 1010 milibares a 985 en el mismo periodo de tiempo. Más que suficientes para considerarlo un proceso explosivo.

Modelo GEM

Incluso el modelo canadiense la profundiza más antes, hasta alcanzar los 975 milibares cuando se sitúa al norte del Cantábrico.

Para enseñarte el potencial que podría tener este proceso explosivo sobre nuestro país, te voy a mostrar la energía que los vientos podrían transferir a la superficie marítima próxima nuestro país, que ya tendría un mar de fondo importante, con olas de más de 8 m el martes, pero que esta borrasca explosiva podría potenciar frente a las costas del Cantábrico.

Video análisis del oleaje

En resumen

Seguimos vigilando la posibilidad de que tengamos un proceso de ciclogénesis explosiva dentro de este temporal invernal. Algo que comenzamos a seguir ayer y que hoy respaldan la mayoría de modelos numéricos meteorológicos. Pero, como doña prudencia es amiga inseparable de la ciencia, vamos a seguir pasito a pasito para ver la evolución en las próximas actualizaciones.

Si sigues con nosotros en este viaje apasionante de análisis del poder de la Madre Naturaleza, lo veremos juntos.

Un fuerte abrazo.