Los modelos comienzan a dibujar algunos cambios a destacar en el horizonte: ¿Qué consecuencias tienen sobre España?

En los últimos días hemos estado analizando cómo podríamos estar asistiendo al final de la ondulación ascendente del Jet Stream al oeste de la península de forma recurrente. Os comenté que al anticiclón de las Azores va a recuperar posiciones en la zona, al tiempo que la Oscilación del Atlántico Norte (NAO) asciende a valores neutrales. Es un cambio en la distribución de las piezas atmosféricas que comentamos podría tener consecuencias para nuestro país.

Posible evolución atmosférica

Lo que te voy a enseñar a continuación es la última actualización del modelo americano GFS. En ella vas a ver como el anticiclón se refuerza en la zona de Azores, pero no terminaría de abrazar nuestro país de forma persistente, permitiendo que las pulsaciones de aire frío alcancen nuestro país desde latitudes algo más altas.

Modelo GFS

Te advierto que la secuencia animada trabaja con un plazo de una semana aproximadamente, por lo que aún no tiene buena fiabilidad.

Quiero que observes como hasta el próximo día 10 de mayo, varias pulsaciones van alcanzar nuestro país, con el anticiclón al oeste de la península. Por momentos las altas presiones logran alcanzarnos, pero según el modelo volveríamos a ver nuevas pulsaciones alcanzar nuestra geografía.

Los vientos giran sobre las bajas presiones en sentido contrario a las agujas del reloj. Si tenemos bajas presiones como en estos momentos al oeste de la península, los vientos se inyectan desde latitudes más bajas, con temperaturas disparadas para la época. Pero al sustituirse las bajas presiones por un anticiclón, sobre el cual los vientos giran en sentido de las agujas del reloj, se corta el patrón que dispara las temperaturas.

Es más fácil explicártelo enseñándote el Jet Stream.

Así está en estos momentos, con la ondulación ascendente. Se desarrolla justo al oeste de la península, levantando de latitud una cresta anticiclónica por nuestra vertical.

La zona de Azores está dominada por las bajas presiones, con el anticiclón desaparecido. Justo por nuestra vertical asciende la cresta anticiclónica. Si comparas los dos mapas, verás como coincide la ondulación con la posición de las bajas atlánticas y el anticiclón.

¿Cambio en la dinámica?

A partir de mañana las borrascas atlánticas lograrán alcanzar partes de nuestro país, dejando precipitaciones que afectarán sobre todo al noroeste de la península. Pero si todo sigue como muestran ahora varios escenarios, llegarán detrás nuevas pulsaciones de inestabilidad. La del próximo fin de semana la tenemos asegurada.

Son varios los modelos meteorológicos que dibujan un horizonte en el que el anticiclón se mantendría apartado por momentos al oeste de la península, permitiendo la llegada de pulsaciones de inestabilidad desde latitudes superiores. Te enseño dos modelos más.

Modelo GEM, 10 mayo

Modelo ICON, 10 mayo

Ojo, lo que te estoy exponiendo en este análisis es una posible tendencia de la atmósfera en plazos que todavía tienen una baja fiabilidad. Estoy tirando de datos de los modelos meteorológicos por un lado, pero por otro también de mi análisis subjetivo e intuición.

Veremos en los próximos días si el camino que estoy analizando en los últimos artículos, nos lleva a un tiempo más inestable de una forma más recurrente y extensa geográficamente. Dependiendo de cómo se posicionen estas pulsaciones de aire frío sobre nuestra vertical, las precipitaciones podrían afectar de formas muy distintas a nuestra geografía.

Lo primero es confirmar que el anticiclón, una vez recupere el terreno que perdió hace semanas, permite que las pulsaciones de inestabilidad nos alcancen de una forma recurrente. 

Después será ver si esas vaguadas o danas son capaces de provocar precipitaciones extensas geográficamente, o se quedan restringidas a algunas regiones.

Un brazo.