La Oscilación del Atlántico Norte, NAO por sus siglas en inglés, de la mano de la Oscilación Ártica, AO por sus siglas en inglés, son dos teleconexiones atmosféricas que nos ayudan a detectar patrones favorables para ver inestabilidad en nuestro país.
Cuanto más positiva esté cualquiera de las dos oscilaciones, menos probabilidades de ver inestabilidad en nuestras latitudes. Cuanto más negativas, mayores probabilidades. Queremos, por lo tanto, que estas gráficas estén lo más hundidas posible, si lo que queremos ver son eventos de inestabilidad y lluvias.
Si consultamos la evolución de ambos índices para las próximas semanas, veremos que se van a mover en valores ligeramente negativos, aunque podríamos decir que los valores serán neutros. Es decir, ni se disparan a valores muy positivos, lo que disminuiría mucho las probabilidades de ver pulsaciones de aire frío e inestabilidad, ni tampoco se desploman a valores muy negativos, lo que aumentaría estas probabilidades.
Has visto que he utilizado muchas veces la palabra probabilidad. Es precisamente lo que hacen estos índices. Nos ayudan a detectar patrones de bloqueos atmosféricos en latitudes árticas, que fuerzan el descenso de pulsaciones de aire frío a latitudes inferiores (negativos), pero esto no garantiza que esas pulsaciones alcancen una zona tan reducida como nuestro país, en comparación con la gran escala con la que trabajan estos índices.
Hemos tenido temporales importantes con valores muy positivos, o hemos estado bajo la influencia de anticiclones persistentes con valores muy negativos. Sobre todo debido a la tendencia del Jet Stream a ondularse mucho en los últimos años.
Lo que nos muestran estos índices es que durante las próximas semanas estas dos oscilaciones no serán impedimento para que las borrascas atlánticas nos sigan alcanzando. Si comenzaran a dispararse a valores muy positivos, sería señal de que el vórtice polar troposférico se fortalece, y el aire frío se comprime en latitudes árticas, más lejos de nosotros. Cuando esto sucede, las borrascas se desplazan por latitudes más altas y los anticiclones subtropicales se fortalecen.
A la vista de lo que nos van mostrando los modelos meteorológicos para la próxima semana y la evolución de estos índices, es bastante probable que continuemos con este patrón de lluvias, como mínimo, hasta los primeros días del mes de noviembre. No es descartable incluso que pueda potenciarse más, a la vista de la salida de esta noche del modelo europeo.
¿Mucha información, verdad? La evolución atmosférica lo requiere, ya que hemos entrado un patrón muy dinámico en el que pueden suceder muchas cosas. Las piezas atmosféricas se han colocado de una forma en la que nuestro país es punto diana de posibles intensos temporales.
Algunos ya los hemos sufrido, otros estamos en estos momentos comenzándolos y otros están por venir.
La Madre Naturaleza manda. Ella decide cómo y cuándo.
Un abrazo.
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Esta entrada fue modificada por última vez en miércoles, 25 octubre 2023 - 17:57 17:57
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