Meteovigo, ECMWF, ICON-EU
No es extraño ver algún día o dos de temperaturas más altas de lo habitual en octubre, o incluso en enero. Lo que no es habitual es ver periodos tan largos en los que las temperaturas parecen más propias del verano en pleno otoño meteorológico. Las entradas de masas de aire con calima desde el norte de África están teniendo una recurrencia tan elevada en los últimos tiempos, que nos hacen ya plantearnos en una nueva realidad climática de nuestro país. Para hablar de algo así deberían pasar en realidad muchos años, más bien décadas, ya que el clima se determina en periodos de observación largos (30 años) para tener una media más clara.
Para entender lo que sucede tenemos que ver la zona en la que está ubicado nuestro país. Justo pegado al norte de África, en plenas latitudes medias, donde las masas de aire se mueven de una forma más errática y cambiante.
En latitudes más bajas la atmósfera es mucho más lenta y predecible, salvo en algunas situaciones, como en las tormentas.
Los vientos suelen moverse en una dirección muy predecible, como en Canarias, con los alisios. Es un buen ejemplo de la diferente dinámica subtropical y de latitudes medias. ¿Quieres verlo? Espera, que te lo ilustro.
Este es el pronóstico del GFS para una zona próxima a Canarias en la presión atmosférica y precipitación.
Casi no hay cambios en los pronósticos a corto e incluso medio plazo. Hay menos incertidumbre y es más claro el pronóstico. Cada línea representa una posible evolución del pronóstico según las dudas del modelo de izquierda a derecha.
Ahora te enseño lo mismo, pero para un punto de latitudes peninsulares. Observa como hay cambios más bruscos en la presión y la incertidumbre aumenta mucho más con el paso de los días, separándose las líneas de cada escenario, con diferencias de presión muy amplias. Son esos bandazos que ves en la aplicación de tu móvil a 8 días, que pasa del “huevo frito” a lluvias torrenciales.
Bien, ahora que entiendes lo cambiante que es la atmósfera en latitudes medias, entenderás que estamos más expuestos a cambios en la dirección de los vientos, llegando, en ocasiones, desde latitudes altas, más frío, y en otras más bajas, más calor.
El problema de la maquinaria atmosférica en nuestras latitudes, es que el “interruptor” que cambia el régimen de vientos de oestes a nortes, a sur … Se está quedando atascado, con una gran recurrencia en la posición que permite la llegada de masas más cálidas desde latitudes inferiores, o que en verano no lleguen masas atlánticas para evitar que se acumule el calor en la superficie durante largos periodos.
Los famosos vientos del oeste, que acercan las borrascas atlánticas están desaparecidos, se ha “fundido el fusible” del interruptor que los activaba.
Las ondulaciones del Jet Stream y los bloqueos que nos dejan días y semanas con un flujo de latitudes más bajas, están permitiendo la llegada una y otra vez de masas desde el norte de África. La calima parece haber dado un paso al frente en nuestro país, fuera incluso de los meses estivales.
En los próximos días vamos a seguir viendo temperaturas más altas de lo habitual en amplias regiones, sobre todo en el oeste-suroeste de la Península. Algo a lo que nos estamos “acostumbrando”.
Mañana seguiremos con temperaturas anormalmente altas para la época en amplias regiones, sobre todo en el suroeste de la Península.
El fin de semana seguiremos con termómetros más altos de lo habitual en la mayor parte del país.
En Canarias el sábado se observan hasta 26º/28º en las islas más orientales, con valores más contenidos en el resto, sobre todo en zonas altas de la isla de Tenerife, donde serán sensiblemente más bajas, con nubosidad y precipitaciones.
Hace unos años el “veroño” nos sorprendía. Pero a estas alturas es algo que ya forma parte casi de lo esperable, aunque en los últimos años hemos visto algunos arranques de otoño más fríos, con nevadas copiosas incluso. Es pronto para hablar de una realidad climática, pero creo que en el contexto climático actual, las medias climáticas de 30 años puede que no sean la “plantilla” ideal para lo que está sucediendo. Los cambios se están produciendo de una forma muy abrupta, en muy pocos años, con patrones que rompen todos los años récords de nuestra corta historia de registros meteorológicos.
Lo que hemos visto este verano, con danas bloqueadas al oeste de la Península, repitiendo el patrón de una forma casi idéntica, es muy llamativo.
La misma dinámica “extraña” que nos toca vivir, puede cambiar su cara, llevándonos al extremo opuesto en cualquier momento.
Ganan por goleada los eventos cálidos, pero las zarpas del Ártico ya nos han mostrado de lo que son capaces en los últimos años.
Son tiempos de extremos. Es momento de vigilar cada paso de la atmósfera, con un potencial que nos hace estar pendientes esperando casi cualquier cosa.
Seguiremos vigilando el horizonte, en la búsqueda de mejores noticias para ver lluvias repartidas y atentos a los eventos que puedan llegar.
Abrazos.
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Esta entrada fue modificada por última vez en miércoles, 5 octubre 2022 - 15:01 15:01
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