Algunos modelos continúan mostrando un aumento de la incidencia anticiclónica pero no terminan de ser claros en los dibujos.
Las personas que seguís mi trabajo sabéis que para el mes de mayo he pronosticado un aumento claro de la incidencia anticiclónica y las altas temperaturas. Los modelos han ido mostrando en los últimos días mapas compatibles con este patrón, pero no terminan de hacerlo de una forma clara.
Los índices de AO y NAO nos ayudan a ver la posible evolución de la circulación atmosférica a largo plazo en el Hemisferio Norte.
El primero, la AO (Oscilación Ártica), nos ayuda a ver posibles bloqueos anticiclónicos en latitudes altas, cuando los índices son negativos, por ejemplo. Cuanto más negativos son los índices, más masas de aire frío tenemos desprendiéndose del Ártico a latitudes medias, que alimentan la inestabilidad por contraste, al entrar en contacto con las masas más cálidas. Cuanto más positiva se vuelve la AO, menos masas de aire frío consiguen descender a latitudes medias, por lo que las probabilidades de ver inestabilidad disminuyen.
Con la NAO ocurre algo similar, con mayores probabilidades de ver inestabilidad con valores negativos y menos con valores positivos, pero centrándonos como su nombre indica (Oscilación del Atlántico Norte, NAO por sus siglas en inglés) en el Atlántico Norte y áreas de influencia, entre las que está por supuesto nuestro país.
Hemos pasado unas semanas con pulsaciones de masas frías e inestabilidad sobre nuestro país y otras zonas del Hemisferio Norte, con heladas tardías que han provocado serios problemas en las cosechas, sobre todo en países vecinos como Francia, aunque en Estados Unidos también han tenido pérdidas importantes.
Todo respondiendo a unas anomalías muy marcadas y bloqueos en latitudes altas, que podemos ver claramente en los dibujos de la AO.
Observa como el mes de marzo tan seco en muchas zonas de nuestro país, coincide con los índices de AO mucho más positivos. Puedes ver también los índices muy negativos de inicios de año, que coinciden con eventos históricos como Filomena. Si ves la gráfica a partir de inicios de abril, observarás el descenso que nos ha llevado a un mes con mayor inestabilidad, aunque no siempre ocurre, todo hay que decirlo. La AO en descenso nos dice que en todo el Hemisferio Norte aumentan las pulsaciones de aire frío a latitudes medias, pero no garantiza que justo nuestro querido país, esté en la diana.
Puedes observar como la tendencia, (líneas rojas), es la que con la llegada de mayo vuelva a ascender, alcanzando valores neutros o ligeramente positivos. Esto refuerza el pronóstico que hemos hecho de un mayo más seco y caluroso, pero no garantiza nada, tan solo aumenta las probabilidades de que suceda.
Se observa el mismo descenso en el mes de abril que ha coincidido con el aumento de la inestabilidad que aún estamos teniendo estos días con Lola. La evolución futura es un poco más errática que la AO, pero se observa igualmente una tendencia al ascenso de la mayoría de los escenarios.
Te vuelvo a recordar que no siempre se traduce en un cambio claro del patrón. No al menos en nuestro país. Si la AO sube es porque los bloqueos anticiclónicos disminuyen en el Ártico sí o sí, pero como el Hemisferio Norte es muy grande, no siempre se traduce en un cambio justo en nuestra porción de tierra-atmósfera. Si tienes algunos conocimientos en predicción meteorológica, habrás observado en ocasiones que la regla no se cumple y con unos índices negativos no llega la inestabilidad o viceversa.
Pero en este caso los modelos sí están plasmando los cambios poco a poco en sus salidas. Lo hacen de una forma un tanto errática, aumentando y disminuyendo la incidencia anticiclónica sobre nosotros en cada salida. Pero la tendencia se va poco a poco plasmando.
El modelo alemán ICON, nos dibuja la entrada de altas presiones la próxima semana de una forma bastante clara. Esos colores rojos representan un aire más cálido y expandido, que se traduce en una mayor estabilidad.
En cambio el modelo GFS desciende la circulación de borrascas más al Sur, por lo que no estaría tan clara la incidencia anticiclónica, al menos no la continuidad.
El modelo GEM está actualizando en el momento de escribir este artículo, pero se observa un dato interesante. El bloqueo de Groenlandia lo refuerza en esta actualización, lo que le está llevando a descender la circulación de borrascas a latitudes más bajas.
Antes
Ahora
Quiero que compares la presión atmosférica de la salida anterior en Groenlandia con 1030hPa y la de ahora con 1050hPa. Un cambio muy importante que favorece el dibujo que ves debajo de estas líneas, bastante más parecido al GFS, con las borrascas muy cerca de la península y un anticiclón de las Azores mucho más “aplastado” o debilitado.
Escenarios muy distintos los que estamos observando, en parte lógico por los plazos tan largos y poco fiables. Veremos en una hora cuando actualice el modelo Europeo, si se parece más al modelo ICON o su dibujo nos acerca más a las borrascas como el GFS y sobre todo GEM.
En cuanto haya salido del “horno” el modelo Europeo, publicaré un nuevo análisis para compartir con el mundo la posible evolución atmosférica, que nos está dejando una primavera muy dinámica, con patrones muy llamativos y en algunos casos históricos.
Saludos.
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